Poco antes de las vacaciones de Navidad, el 15 de diciembre tuvimos la tercera sesión de los cuentos del recreo. El tiempo no nos acompañó en esta ocasión así que yo tuve que abrigarme y ellos arrimarse unos a otros. Mientras unos tomaban asiento, otros llegan y los menos se marchan a la biblioteca pues querían repasar para el examen que tenían en la siguiente hora. Fueron varias las chicas que se disculparon por no quedarse a escuchar las historias que tenía preparadas para esa mañana.
A última hora cambié los cuentos que tenía previsto contar pues la semana anterior había realizado un monográfico de Benedetti llamado «Una hora con Mario» y me apetecía contarles uno de esos relatos: «La noche de los feos».
Así son los cuentos están vivos, sales de casa con una lista en la cabeza o apuntada en un papel y cuando miras a los ojos de quien te escucha todo puede cambiar.
Es una historia tierna y dolorosa a la vez entre dos jóvenes que son feos, muy feos. Un cuento que gusta mucho allí donde se escucha y que no deja de sorprenderme por la reacción tan diferente que encuentro en uno u otro lugar. Aquí se escucharon risas donde otras veces ví lágrimas.
Unos 35 alumnos disfrutaron en esta ocasión de las historias. Pronto será la siguiente.